miércoles, 22 de agosto de 2012

Uno menos

Hace una semana que tengo un órgano menos, el apéndice, esa tripa que solo sirve para dar problemas, aunque de ser sincera fuera de la dieta desgraciada que tengo que llevar estos días, más que problemas, la recuperación de esta tripa ha sido más un buen reajuste de perspectivas. Y es que cuando tienes tres agujeros en la panza la óptica cotidiana cambia al cien por ciento; quién diría que usas el abdomen absolutamente todo el tiempo, que una lap top pesa tanto que se vuelve un objeto incargable para una post operada; que caminar una cuadra puede ser todo un deporte olímpico y que las flores y la compañía son mejores que los fregados antibióticos (gastritis free). No sé si fue apendicitis o apendejitis lo que me quitaron pero como me dijo un primo que pudo verme post operada "hasta te veo mas ligera", y no solo por la desgraciada dieta, si no por la facha que da salir de la rutina, obligatoriamente o no, bajar el ritmo sirve de mucho para el ánimo y para tomarse las cosas menos en serio y darle su lugar a lo que realmente importa, como besos al pie de la puerta, las cenas en familia y teclear por gusto mientras uso lentes de pasta. No celebro la operación pero si la calma del uno menos, que mantendré aún cuando me reintegre al sistema en una semana más. Mientras estaré regresando aquí con más frecuencia y más ligera. @gavsvilech