domingo, 27 de enero de 2008

una montaña rusa...

Empezó la semana y fue como hacer fila para subirme la montaña rusa. Infinidad de factores , desde un ensayo sin terminar , fechas de entrega más demandantes de lo común y mucho tráfico fueron en cierta parte culpables de que decidiera subirme a un ride en la montaña rusa , durante un semana completa.
Lo increíble de las cosas es como suceden en secuencia , como si apretaras el disparador de una cámara fotográfica, diez tomas de la misma acción en las que puede pasar de la risa al llanto en cuestión de segundos...pues así fue.

Una pesadez que parecía que me comprimía el aire, se empezaba a sentir ya el Lunes por la noche ,hasta la voz más dulce aturde. Producto de una larga conversación telefónica , el jueves por la noche se me hincharon los ojos y las lágrimas fungieron como catársis.
¿Que hacer cuando al hablar con la persona que normalmente te alegra los días ,su voz parece tan lejana e indiferente?...El saber que tienes a alguien tan cerca y a la vez tan lejos es peor que no tener nada y aún peor es tener tiempo para pensar en ello. Así se fue esa noche y me di cuenta que es cierto que la paciencia es el mejor don que alguien puede tener. Las cosas se arreglan solas y caen en su sitio después de la tempestad.

Curvas , estrepitosas bajadas y subidas, cambios de velocidad y las montaña rusa no se detenía ....Pero como decía las cosas caen su sitio y los amigos ayudan, te hacen fuerte de la nada y es entonces cuando pasas del llanto a la risa en un segundo.

Si los amigos son la familia que uno escoge y también los mejores psicólogos, además de salir barata la consulta , ja , dan los mejores consejos. Alguien de verdad se preocupa por ti cuando es capaz de contar tantos chistes como se acuerde para hacerte reír y parar tu llanto , escuchan gritos insoletes y agudos o simplemente te abrazan y escuchan lo que haya de desahogar... Sin ellos, sería más difícil bajarse de la montaña rusa.

Ahora después de un fin de semana agitado, divertido y excesivo todo esta mejor , se ven las cosas en perspectiva y el corazón esta tranquilo de nuevo, finalmente las lágrimas se curaron con besos.

Hacer catársis es necesario , de ves en cuando vale la pena bajarse de los tacones y caminar descalzo para estar tranquila..

martes, 15 de enero de 2008

tacones sobre el afalto...

Caminar es algo que como seres humanos tomamos por sentado , pero para los que vivimos en una ciudad grande , cada paso se nos llena de un aroma , un sónido y una visión distinta, que en suma logran engarzarse en historias que van formando parte de tu vida. A medida que recorremos distancas más largas , nuestros pasos se hacen también más fuertes, más inteligentes , tanto que aprendemos a caminar de nuevo... en ocasiones tan cautelosos como si estuvieramos sobre una cuerda floja y otras ágiles y atrevidos , con pasos a los que pareciera que el mundo se les acaba.
Pero lo cierto es que no importa que tan rápido o lento se den los pasos, mientras estos sean siempre firmes y en cada golpeteo disfruten lo que hay alrededor...
Pues nada dicen que cuando se conoce un lugar nuevo , lo peor que podemos hacer es tomar el camioncito turístico, pues ningún guía por más local que sea te va a dejar acercarte a conocer las cosas como tu las quieres ver y así pasa con la vida. Es un andar constante , cotidiano y el camino se hace día a día , siempre cambiante y alimentado de las cosas que nos rodean del sentir de otros tacones , aromas , y voces...

La vida se conoce andando ,con el sentir de unos tacones ....